Impermeabilidad - Prismáticos
Por supuesto, no sólo utilizamos nuestros caros prismáticos al aire libre, sino también en nuestras casas con calefacción central. También los llevamos cuando salimos a observar aves, en busca de ese pájaro escurridizo que sólo aparece cuando llueve. Y cuando nos vamos de vacaciones, nos los llevamos a la selva tropical, donde el factor de humedad es del 100%.
Y, por supuesto, no queremos que nuestros prismáticos se empañen o se enmohezcan, estropeando las imágenes que confiamos en ver. En pocas palabras, en la mayoría de los casos, es de suma importancia que los prismáticos sean impermeables. Para hacerlos herméticos, los prismáticos se purgan o llenan de nitrógeno o argón. La purga de los prismáticos garantiza que éstos no se empañen cuando haya grandes diferencias y fluctuaciones de temperatura. Una gran ventaja.
Por desgracia, a menudo es difícil determinar el grado de estanqueidad de los prismáticos. Una cubierta o revestimiento de goma no garantiza que los prismáticos sean realmente estancos. Sin embargo, este revestimiento de goma protege los prismáticos de golpes y sacudidas.
¿Y el término "resistente al agua" significa realmente que los prismáticos pueden sumergirse en el agua o que únicamente pueden soportar un chaparrón? Todo es bastante confuso. Sin embargo, puedes suponer con seguridad que los prismáticos verdaderamente estancos llevan la etiqueta "resistente al agua" y/o "relleno de nitrógeno".
Y también puedes asumir con seguridad que los prismáticos muy baratos no son impermeables, aunque la etiqueta indique que lo son.
