¿Cómo se limpia una sartén quemada?
Es bastante frustrante tener una sartén quemada. Especialmente cuando esa sartén es de acero o acero inoxidable. Los restos negros y pegados de comida pueden parecer imposibles de quitar, haciendo que te preguntes si esta sartén es siquiera salvable en absoluto. ¡No te preocupes! Te explicamos diferentes métodos que puedes utilizar para limpiar el interior y el exterior de tus sartenes. Tanto si la comida está quemada, pegada o apelmazada: con estas técnicas, sabrá cómo devolver a su sartén su antiguo esplendor. ¡Quedará lista para muchos años más de cocina!
Limpiar el interior de las sartenes
Al cocinar, las manchas más difíciles se producen en el interior de la sartén. Con los siguientes métodos, limpiar el interior de la sartén es pan comido.
Limpiar la sartén con bicarbonato y vinagre
Empieza espolvoreando una cantidad generosa de bicarbonato sódico en las zonas quemadas de la sartén. A continuación, echa vinagre sobre el bicarbonato. Deja la mezcla en remojo durante unos minutos, para que la efervescencia pueda afectar a los restos de comida quemada. Utiliza un cepillo de cocina o una esponja suave para frotar con cuidado las zonas quemadas. Aclara bien la sartén con agua caliente y sécala bien.
Limpiar la sartén con sal y limón
Espolvorea una capa de sal sobre las zonas quemadas de la sartén. Corta un limón por la mitad y exprime el zumo sobre la sal. Utiliza las mitades del limón para frotar las zonas quemadas con una ligera presión. Deja la mezcla en remojo durante unos minutos, para que la efervescencia pueda afectar a los restos de comida quemada. Aclara bien la sartén con agua caliente y sécala bien.
Limpia la sartén con agua caliente y un poco de detergente
Llena la sartén quemada con agua, la suficiente para cubrir completamente las zonas quemadas. Añade unas gotas de detergente para vajillas al agua. Pon la sartén en el fuego y hierve el agua. Dejar hervir el agua durante unos minutos. Retira la sartén del fuego y deja que se enfríe. Utiliza un cepillo de cocina o una esponja para limpiar la sartén y eliminar los restos. Aclara bien la sartén con agua caliente y sécala bien.
Limpiar el exterior de las sartenes
Especialmente cuando se cocina con gas o una llama abierta, la sartén puede ensuciarse y ennegrecerse. Los siguientes métodos te ayudarán a conseguir que el exterior de la sartén vuelva a estar limpio.
Limpiar el exterior de la sartén con una pasta de bicarbonato de sodio
Haz una pasta mezclando bicarbonato sódico con una pequeña cantidad de agua. Aplica la pasta en el exterior de la sartén, especialmente en las zonas quemadas. Utiliza un paño suave o una esponja para frotar la pasta sobre las manchas. Aclara bien la sartén con agua caliente y sécala bien.
Limpiar el exterior con vinagre y aceite de oliva
Mezcla partes iguales de vinagre y aceite de oliva en un bol. Moja un paño limpio en la mezcla y frótalo en las zonas quemadas de la sartén. Sigue frotando suavemente hasta que las manchas empiecen a desvanecerse. Aclara bien la sartén con agua caliente y sécala bien.
Limpiar el fondo de la sartén
Limpiar la parte inferior de las sartenes con bicarbonato de sodio es un método sencillo y eficaz. Empieza espolvoreando una cantidad generosa de bicarbonato sódico en las zonas quemadas de la sartén. Añade unas gotas de agua para crear una pasta. Déjalo en remojo unos minutos para que el bicarbonato haga su trabajo. A continuación, utiliza un cepillo o una esponja para fregar suavemente el fondo del recipiente con movimientos circulares. El bicarbonato de sodio funciona como un abrasivo natural y ayuda a eliminar las manchas difíciles. Aclara bien la sartén con agua y sécala para que quede limpia y brillante.
Limpiar una sartén de acero al carbono
Después del uso
No olvides limpiar tu sartén de acero al carbono (también conocida como sartén de chapa de acero). Llénala de agua tibia y déjala en remojo, así será más fácil eliminar los restos de comida. No uses jabón para platos. Utiliza un cepillo de vajilla, una esponja o un trozo de tela para frotar suavemente la sartén y limpiarla. Aclara bien la sartén con agua caliente y sécala bien.
Eliminando manchas difíciles
Si hay manchas persistentes o restos de comida en la sartén, llénala de agua y añade unas gotas de detergente. Se hierve el agua y se cuece a fuego lento durante unos minutos. Utiliza un cepillo de vajilla suave o una esponja para limpiar suavemente las manchas. Aclara bien la sartén con agua caliente y sécala bien. Si los restos quemados están muy pegados, deja la sartén en remojo. Añade agua tibia con un poco de detergente para platos durante unas horas o incluso toda la noche. Esto facilita la eliminación de las manchas más difíciles.
Tratamiento del óxido
Si se han formado manchas de óxido en la bandeja de acero al carbono, límpialas con un cepillo de alambre o papel de lija fino. Aclara bien la sartén con agua templada para eliminar todas las partículas de óxido. Aplica una fina capa de aceite a la sartén para protegerla de la oxidación.
Sazonar una sartén de acero al carbono
Para mantener la sartén de acero al carbono en óptimas condiciones, lo mejor es volver a sazonarla de vez en cuando. Calienta la sartén a fuego medio-alto y añade una fina capa de aceite en el interior de la sartén. Frota el aceite en la sartén con una toalla de papel o un cepillo resistente al calor. Calienta la sartén unos minutos para formar la capa protectora. A continuación, deja enfriar la sartén y limpia el exceso de aceite antes de guardarla. Limpiar una sartén de acero al carbono requiere un poco más de cuidado, pero con estas sencillas técnicas puedes asegurarte de que la sartén conserve sus propiedades antiadherentes naturales y tenga una larga vida útil. Un mantenimiento y cuidado regulares garantizarán que la sartén de acero al carbono esté siempre lista para preparar deliciosos platos.
¡Empieza!
El mantenimiento de las sartenes es esencial para un uso prolongado y un rendimiento óptimo. Una limpieza regular y un buen cuidado de las sartenes las mantendrán perfectas y conservarán su calidad de cocción. Ya se trate de limpiar restos quemados, eliminar manchas o cuidar el fondo de la sartén. Con las técnicas de limpieza adecuadas, resulta sencillo y eficaz. No olvides seguir siempre los consejos del fabricante y tener cuidado con los abrasivos para evitar arañazos. Con estos consejos y un poco de cariño, prepararás platos deliciosos con tus sartenes durante muchos años.