Sazonar y limpiar el horno holandés
Un horno holandés de hierro fundido es una olla versátil. Con una olla holandesa se puede preparar prácticamente cualquier comida. El hierro fundido garantiza una distribución uniforme del calor, por lo que es perfecto para cocinar a fuego lento, asar y hornear. Para disfrutar plenamente de tu horno holandés, es importante sazonarlo adecuadamente, limpiarlo con regularidad y mantenerlo en buen estado. En este artículo te explicamos todos los pasos para realizar el mantenimiento de tu olla holandesa.
El proceso de sazonar tu olla holandesa proporciona una capa antiadherente natural que protege el hierro fundido contra el óxido. Para sazonar la olla holandesa se utiliza el aceite, que rellena los poros del hierro fundido y forma una capa entre el hierro y los alimentos. Puedes sazonar una olla holandesa de diferentes maneras: en el fogón, en el horno o sobre un fuego abierto, como una hoguera o una barbacoa. A continuación se explican todos los métodos. Elige el que mejor se adapte a tus necesidades. Un Dutch Oven nuevo debe lavarse primero para eliminar los residuos de fabricación. Si tu Dutch Oven se ha utilizado más de una vez, también debes limpiarla para eliminar cualquier residuo de comida.
Limpiar tu horno holandés de hierro fundido antes de sazonarlo
- Limpieza: antes de empezar a sazonar la olla, limpiala a fondo. Utiliza agua tibia y un detergente suave para eliminar cualquier residuo de fábrica. Frota suavemente la sartén con un cepillo de vajilla suave para limpiar la superficie. Aclara bien la sartén y sécala bien.
Sazonar tu horno holandés de hierro fundido
- Aplicación del aceite: aplica una fina capa de aceite vegetal en toda la superficie de la olla holandesa, incluida la tapa. Elige un aceite con un punto de humo alto, como el de linaza, colza o uva. Asegúrate de cubrir tanto el interior como el exterior de la sartén. Retira el exceso de aceite con un paño limpio o papel de cocina. Atención: es importante que sea una capa fina de aceite. Un charco de aceite, por ejemplo, no sazonará bien la sartén.
- En el horno: este método es popular y fácil. Calienta el horno a 200°C. Pon la olla, boca abajo, sobre la rejilla del horno, de esta forma el exceso de aceite puede gotear. Para mantener el horno limpio, puedes colocar una bandeja de horno debajo de la olla. Hornea la olla de 1 a 2 horas y déjala enfriar en el horno.
- En el fogón: esta es una alternativa práctica si no tienes horno o una hoguera. Aplica una fina capa de aceite en el interior y el exterior de la sartén. Calienta el recipiente en el quemador más grande de la placa hasta que el aceite empiece a humear. Mueve la olla durante el proceso para que el aceite se distribuya uniformemente.
- Con una hoguera: la forma más divertida de sazonar una olla de hierro fundido es sobre el fuego. Limpia bien la olla y aplica una fina capa de aceite. Coloca la olla sobre el fuego o en la barbacoa y deja que se caliente durante 20-30 minutos hasta que el aceite empiece a humear. Retira la sartén del fuego y unta el aceite por toda la olla con un trozo de tela. ¡Ten cuidado! La olla y el aceite estarán muy calientes en este punto. El aceite empezará a humear y voilà: la olla está sazonada.
- Asegúrate de que el horno holandés se enfría correctamente. Esto garantiza que la capa de sazonador se cuaje bien. Si es necesario, repite.
Limpiar tu horno holandés
Deja enfriar completamente el horno holandés después de usarlo. No intentes limpiarlo mientras esté caliente, ya que podrías dañarlo. Si, por ejemplo, echas agua fría en una sartén de hierro fundido cuando aún está caliente, puede que la olla se agriete. Utiliza una espátula de madera o de silicona o una rasqueta especial para retirar los restos de comida de la olla holandesa. Ten cuidado de no dañar la capa de sazonador. A continuación, llena el recipiente con agua caliente y, si es necesario, límpialo con un detergente suave. Utiliza una esponja suave o un cepillo de cocina para limpiar el interior y el exterior del horno holandés. Si quieres hacer algo un poco más minucioso, la Lodge Chainmail & Silicone Scrub Sponge es una opción segura. No utilices estropajos rugosos ni lana de acero, ya que pueden eliminar el sazonador. Aclara bien el horno holandés para eliminar los restos de jabón. Seca bien el recipiente para evitar que se oxide. Asegúrate de que tanto el interior como el exterior estén completamente secos.
Cómo guardar tu horno holandés
Después de limpiar y secar, aplica una fina capa de aceite a las superficies interior y exteriores. Esto ayuda a mantener y proteger el sazonamiento. Puedes utilizar aceite de girasol, Petromax Care and Seasoning Conditioner o el Lodge Seasoning Spray. Guarda el horno holandés en un lugar seco, dejando la tapa un poco abierta para que circule el aire y evitar que se acumule la humedad. Un mantenimiento regular y la limpieza de la olla después de cada uso ayudarán a mantener tu horno holandés en buen estado y a prolongar su vida útil. Evita utilizar productos químicos agresivos o materiales abrasivos que puedan dañar el condimento o la superficie del horno holandés.